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Cerramos

Pues sí eso mismo, cerramos el chiringuito, después de 2313 días, o lo que es lo mismo, seis años y cuatro meses, desde que publiqué el primer post allá por el 2004, he decidido dar un giro radical a este blog personal.
Los motivos son bastante simples, en todo este tiempo el blog ha pasado por diferentes servidores, ha tenido muchos altibajos alrededor de sus 1122 entradas, y como consecuencia de este trajín este que era un blog personal se ha convertido en una amalgama de categorías, etiquetas y posts que hace bastante complicado el adaptar el aspecto del blog a los temas actuales de wordpress.
Puedo sinceramente decir que estoy contento de haber recibido unos 1034 comentarios y unas 14879 visitas desde la ultima vez que instalé wordpress y reinicié las estadísticas, y por ello quiero dar las gracias a todos esos visitantes, unas veces anónimos, y otras veces más o menos queridos.
Pero vamos, que el hecho de dar este carpetazo no quiere decir que todo este trabajo y este tiempo se vaya a perder en el tiempo, mas bien voy a mover todo este contenido a un subdominio dentro de este dominio y a darle un enfoque nuevo al dominio principal.

Ahora solo falta que mi servidor active este nuevo dominio y pueda hacer el traspaso de un lado a otro… Seguramente cuando muchos de vosotros leáis esta página todo esto será cosa del pasado y parte de mi historia personal…

Un abrazo a todos y nos vemos en www.ojosajenos.com

Esto se acaba

Pues va a ser que si, esto se acaba, otro año más que se nos pasa casi sin habernos dado cuenta…

Y otra vez los mismos post ñoños haciendo balance del año que se acaba.

La verdad es que todos los años la misma historia empieza a resultar cansino. Que si, que el año se acaba, pero no deja de ser un mero trámite que tenemos que pasar, pasamos por los años más preocupados de lo que dejamos atrás que de lo que nos queda por delante.

Personalmente prefiero no pararme a hacer un balance de lo que ya llevo hecho en el año, eso ya lo he vivido y lo se. Ahora me interesa más lo que me queda por delante, me caso en unos cinco meses, tengo un montón de cosas todavía por hacer y por decidir y cada día queda un poco menos de tiempo para hacerlas.

Espero que el año que empieza sea por lo menos tan bueno como este que se va quedando atrás.

Una propuesta

Me resulta extraño estar sentado en mi nueva casa oyendo un programa de radio que me transporta a un veintinueve de mayo del año dos mil siete, imagino que esa noche yo estaría sentado cómodamente en la soledad del que en aquel momento era mi cuarto, imagino que o estaría estudiando o (lo más probable) sentado frente a mi ordenador trasteando entre códigos web y páginas diversas  y  por un momento me embarga una extraña sensación de nostalgia y alegría, sobre todo cuando escucho esta frase que hace se me pongan los pelos como escarpias del 7:

Todos somos cautivos de tiempo y rehenes de la eternidad

Supongo que a estas alturas alguno de los visitantes de esta página ya habrán adivinado de qué programa de radio estoy escuchando, e imagino que uno de ellos notará como un ligero rubor se apodera de sus mejillas porque le estoy dedicando este post…

Para el resto de los visitantes les diré que estoy hablando de El RoNpeolas, que no sólo es un amable lector que se pasa por aquí y nos deja sus comentarios a los desvaríos que suelto, sino que ha sido uno de los programas veteranos de la radiodifusión española, el RoNpeolas tal y como dicen en su web es mas de 20 años de buen hacer en diversos formatos radiofónicos.

Un programa que tras veinte años dando caña en las ondas dejó de emitirse y nos dejó huérfanos en la soledad de las noches.

Es por ese motivo de hijo abandonado que me gustaría lanzar un guante a mi querido amigo RoNpeolas para proponerle una de esas tan de moda joint venture y diseñar un digno descendiente de éste querido programa  en forma de podcast con una periodicidad a decidir (personalmente con uno al mes me conformaría).

Puede que ésta sea una propuesta suicida, pero la simple idea de colaborar con la redifusión del espíritu RoNpeolas hace que sienta un cosquilleo en el pecho y que una lágrima de emoción se escape de mis ojos, y por ello creo que merece la pena intentarlo y quien sabe, igual hasta consigo convencer a alguien para llevar esta locura a buen puerto…

Por cierto, si queréis saber lo que se siente al escuchar un programa que es mucho más que un programa, podéis visitar este enlace…

Un programa de El RoNpeolas

Un saludo a todos.